El banco de espermatozoides es un servicio de In Vitro IVF que permite la Criopreservación de muestras de espermatozoides de donantes varones sanos con óptima calidad de los mismos para ser una opción terapéutica de alta posibilidad a los pacientes que así requieren para tener un bebé en el hogar.
El banco de semen permite, además, el transporte de las muestras a otras zonas geográficas muestras valiosas como las obtenidas antes de tratamientos de quimioterapia o biopsias y mejora el aprovechamiento del eyaculado, ya que al congelarse las muestras en píldoras el único eyaculado o biopsia puede usarse en diferentes ocasiones.
Se utiliza también para preservación de espermatozoides de pacientes a quienes se les realiza aspiración de epidídimo o biopsia testicular, con el fin de disminuir futuros procedimientos en caso de requerirse, siempre bajo autorización del paciente.
Indicaciones para el uso del banco de semen. El banco de semen ofrece la posibilidad de guardar muestras congeladas y asegurar así la posibilidad de engendrar en caso de pérdida previsible o imprevisible de la fertilidad del varón.
Los casos más frecuentes son los siguientes:
• Pacientes con dificultades para el eyaculado, debidas a impotencia, eyaculación retrógrada, malformaciones congénitas, etc.
• Pacientes cuyas muestras son difíciles de obtener, como ocurre con las biopsias testiculares, las muestras de semen lavado por VIH VHC, etc.
• Pacientes en edad reproductiva y sin hijos a los que se les ha diagnosticado un cáncer y que por ellos van a recibir diferentes tratamientos
• Pacientes que por distintas razones es difícil que estén presentes en el momento en que se va a utilizar la muestra.
• Pacientes sometidos a tratamientos farmacológicos con efecto Teratogénico (ej. tratamiento del interferón en la hepatitis C.)
• Pacientes sometidos a vasectomías, para garantizar sus posibilidades reproductivas en caso de que cambien de opinión.
• Profesionales de riesgo, o pacientes que congelan semen como medida preventiva sin otro motivo (son los casos más frecuentes).
Este semen puede estar destinado a mujeres sin pareja, a parejas en las que el varón presenta una patología seminal grave, incluso con ausencia de espermatozoides, a parejas en las técnicas de reproducción asistida han fracasado repetidamente, o en las que el varón es seropositivo para el VIH o a portadores de alteraciones genéticas todavía no tratables mediante diagnóstico Preimplantacional.
La indicación para la congelación del semen es clara: evitar el periodo de ventana de enfermedades infecciosas como el VIH, que se comprueban rutinariamente mediante la presencia de anticuerpos en sangre frente al virus. Dado que estos solo son detectables en suero seis meses después del contacto de la enfermedad, las muestras de semen de donante deben ser almacenadas durante ese periodo antes de realizar la comprobación serológica y poder utilizarlas con seguridad. La congelación de la muestra implica que, tras la descongelación, disminuirán los espermatozoides con buena movilidad, y por ello es necesario partir de unas muestras un número elevado de espermatozoides en fresco.